Ricardo Yáñez

Share this… Facebook Pinterest Twitter Whatsapp Messenger Piensa el paso que das, no a dónde vas… Piensa el paso que das, no a dónde vas; de pronto puede ser a dónde ibas. Piensa el paso que das, la voz que cribas por cima del discurso, que quizás pierda el paso y se pierda, y de … Leer más

Share this… Facebook Pinterest Twitter Whatsapp Messenger . La luz es el silencio en que te miro La luz es el silencio en que te miro mirarme desde qué paciente hondura —radical y flexible— que inaugura no mi felicidad sino el retiro a tu felicidad, donde respiro tal soledad que asiéntase en finura lo que … Leer más

Share this… Facebook Pinterest Twitter Whatsapp Messenger Qué tal si me decido a ser el dueño de lo que digo vivo y lo acordado conmigo mismo cumplo y lo acotado dejo de este retiro en que me empeño, qué tal si, puede ser, relajo el ceño y atiendo el resplandor algo azorado que a retazos … Leer más

Share this… Facebook Pinterest Twitter Whatsapp Messenger . Oscuridad le dio los estatutos que observarse se deben si se quiere hacer felicidades de minutos empeñados nomás en lo que hiere. Halló en la oscuridad diamantes brutos y se puso a tallarlos a destajo por procurar brillantes impolutos, trabajo en el que no hay ningún atajo. … Leer más

Share this… Facebook Pinterest Twitter Whatsapp Messenger . Es una sensación cual de vacío, de vacío feliz, logrado, quieto, es sin obligación haber el reto aceptado, asumido, vuelto mío, el reto de volver en mí; confío que dudaba si no como en secreto me imponía yo mismo oscuro el veto de a mi voz acceder. … Leer más

Share this… Facebook Pinterest Twitter Whatsapp Messenger De cierto soy un muerto, y desearía… Ricardo Yáñez De cierto soy un muerto, y desearía ciertamente vivir, vivir espero, y ha de venir la hora, Dios primero, en que a vivir me lance la alegría con que crece el frijol y la sandía rastrera agradecida pone esmero … Leer más

Share this… Facebook Pinterest Twitter Whatsapp Messenger En mi frente aparecen… Ricardo Yáñez En mi frente aparecen frente a frente y en medio hay una flor, nube y rubí, dos venados, en mí pero sin mí, y así mi hablar regresa a lo inocente.  Da en el pecho un violín resplandeciente, punge y doblega y … Leer más