La copa negra, César Vallejo


La copa negra 

La noche es una copa de mal. Un silbo agudo
del guardia la atraviesa, cual vibrante alfiler.
Oye, tú, mujerzuela, ¿cómo, si ya te fuiste,
la onda aún es negra y me hace aún arder?

La tierra tiene bordes de féretro en la sombra.
Oye, tú, mujerzuela, no vayas a volver.

Mi carne nada, nada
en la copa de sombra que me hace aún doler;
mi carne nada en ella
como en un pantanoso corazón de mujer.

Ascua astral… He sentido
secos roces de arcilla
sobre mi loto diáfano caer.
¡Ah, mujer! Por ti existe
la carne hecha de instinto. ¡Ah, mujer!

Por eso ¡oh negro cáliz! aun cuando ya te fuiste,
me ahogo con el polvo
¡y piafan en mis carnes más ganas de beber! 

César Vallejo 


Más de César Vallejo | BUAM | BAM | Suscribirse

Puedes leer sobre la vida, la obra y el contexto del autor en la página César Vallejo en Wikipedia.


Otros poetas:


Descubre más desde Altavoz México

Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.

Deja un comentario